Los niños y el agua: 10 consejos para un verano seguro.
Se aproxima el verano e inicia la temporada de jugar en el agua para los niños. Si bien es una experiencia divertida y una
buena forma de hacer ejercicio, es necesario tener en cuenta que el agua también representa un riesgo y que el rol de los
adultos es fundamental en la educación y prevención de accidentes.
Los niños pequeños son especialmente vulnerables ya que se pueden ahogar en menos de 6 cm de agua. Bañarse sin permiso de los
padres, no respetar la digestión o entrar de golpe en el agua son algunas de las prácticas que pueden ser peligrosas para los
niños en la piscina, mar o río.
Para poder evitar los accidentes, y disfrutar del verano de manera segura, te acercamos algunos consejos para que tengas
en cuenta:
- Meterse al agua siempre en compañía de un adulto.
- Usar elementos de flotación, adaptados a su tamaño y correctamente colocados.
- Respetar la digestión. No es bueno ingresar al agua inmediatamente después de comer.
- Cuidar la piel. No exponerlos al sol entre las 10:00 y las 16:00 hs, usar pantalla solar superior a 50 y elementos de protección como gorros, trajes de baño con protección UV, etc.
- Enseñarles a nadar desde pequeños y a respetar las indicaciones de los guardavidas, como las señales de precaución y prohibición de baño. También es importante que aprendan a pedir auxilio.
- Buena hidratación, preferentemente agua, y evitar las bebidas azucaradas.
- Evitar permanecer en el agua en momentos de mucho viento y tormenta eléctrica.
- La temperatura corporal desciende más rápido en el agua. Si el niño tiembla o presenta calambres musculares, sácalo del agua inmediatamente.
- Cuidar el agua. Es importante enseñarles, desde pequeños, sobre la contaminación del agua.
- En piscinas nunca dejar:
- juguetes y objetos atractivos que floten ya que los niños no tienen noción del peligro y se pueden acercar.
- sillas, mesas, reposeras o algo que esté próximo al cerco para que los niños no se puedan trepar.
Publicaciones anteriores.